El Zoo de Hangzhou en China se ha negado a quedarse de brazos cruzados después de que un video de uno de sus osos se volviera viral, obligando a los funcionarios a desmentir que se tratara de un humano disfrazado.
La controversia se desató cuando el oso malayo, de nombre Ángela, fue captado de pie y mirando a los visitantes con asombro. El zoológico se vio obligado a emitir un comunicado negando rotundamente que se trate de un ser humano: "Algunas personas piensan que me pongo de pie como un humano. Parece que no me entienden muy bien", decía el comunicado, que daba voz a la osa.
El video del animal ha atraído la atención de los espectadores debido a sus delgadas patas y pliegues de pelaje que hacen que el animal parezca una persona disfrazada de oso.
